Fotos Vintage: el encanto de lo retro
El vintage está de moda. No sólo en la ropa y en los objetos decorativos, donde se afianzó este término (que procede en realidad del mundo de los vinos), sino también en el mundo de la fotografía. Cierto es que la tecnología todo lo invade, que usamos cámaras, gádgets y aparatos cada vez más modernos, pero también lo es que vuelve lo clásico y lo retro.
Lejos de explicaros cómo se consiguen fotos vintage, pues hay miles de tutoriales sobre el tema en internet, lo que queremos es mostraros los resultados. Y qué mejor que hacerlo de la mano de Carles y Estela, que posaron relajados y alegres en este reportaje preboda donde podéis apreciar lo que se puede lograr con esos efectos.
Las fotos vintage recurren a los acabados impresos de las cámaras analógicas, e incluso a ciertos defectos o imperfecciones, que hoy en día lo que hacen es ofrecernos imágenes románticas, con un brillo especial y con un toque de calidez. Se trata de aplicar, una vez la foto ya está hecha, algunos filtros, tocar contrastes, colores e incluso nitidez, jugando con el grano tan típico de las fotografías realizadas con cámara analógica.
Por ejemplo, el contraluz del precioso beso de Carles y Estela no sería el mismo si no tuviera ese halo algo setentero. Lo mismo con la fotografía en la que los dos corren agarrados por la playa, que bien podría estar en un catálogo de moda de esa misma época.
Lo interesante es que pese a tener un acabado como de aquél momento, con menos brillo y con tonos medios, a nuestros ojos, y más en el futuro, la imagen permanecerá plenamente vigente y seguirá teniendo esta sofisticación que se consigue con las fotografías vintage.
Lo vintage está asociado a personas creativas y de gusto refinado, por lo que ¿qué mejor para recordar vuestro gran día que una imagen que perdure en el tiempo?
